Bouchons lioneses: rico, barato y abundante

Así como los porteños tenemos nuestros clásicos bodegones, la ciudad francesa tiene sus lugares típicos, para probar sus mejores platos

Bouchon liones (crédito @mfabiano_sg)

A 390 kilómetros de París, la ciudad de Lyon es famosa por su rica gastronomía. Fue la cuna del gran chef Paul Bocuse, tiene sus platos típicos, mercados, el vino Beajulais y sus bouchons, restaurantes tradicionales locales.


Los bouchons son para Lyon lo que los bodegones a la ciudad de Buenos Aires. Se trata de establecimientos donde la protagonista es la comida. Generalmente ofrecen menúes fijos de alrededor de 12 Euros, que incluyen entrada, plato principal y postre.

Si bien muchos lugares tienen en su vidriera escrita la palabra "bouchon" no todos lo son. Los auténticos, están certificados por la asociación Les Authentiques Bouchons Lyonnais y tienen en su entrada un sticker que lo comprueba.

¿Qué se puede comer en los bouchons? 

Sopa de cebolla (crédito @mfabiano_sg)

De entrada, se puede probar la ensalada lionesa, que lleva lechuga, cebolla, panceta y huevo poché, con aderezo de mostaza de Dijón; o la típica sopa de cebolla, que lleva por encima queso gratinado.

Quenelles (crédito @mfabiano_sg)

Uno de los platos principales más famosos de la zona son las quenelles: una masa de harina con pescado (algo así como una croqueta a la que se le da forma con dos cucharas) y se sirve con salsa. También podés probar las sabodets, salchichas de seso, servidas generalmente con papas.

Tarta praliné (crédito @mfabiano_sg)

Para la hora del postre, podés comer la clásica creme brulé francesa o la tarta praliné, rellena con crema y almendras coloreadas.